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16/11/2015 |
Como decía el Capitán Garfio en Hook: HE TENIDO UNA EPIFANÍA.
Lo siento, me vais a odiar porque esto va a retrasar todos los demás proyectos, pero como tampoco es de vital importancia para nadie excepto para mí ;) pues voy a seguir esta corazonada.
Ayer domingo me desperté a las siete y poco, después de un sueño dentro de un sueño, ambos increíbles. En el sueño me despertaba y hablaba con mi madre del otro sueño porque iba a escribir una novela con él.
Todo ocurría en un pueblo, unos "quintos" se iban a la capital para estudiar en la universidad y tenían que pasar unas "pruebas" antes de irse, para celebrarlo.
Esa idea me sigue gustando mucho, pero cuando me desperté, le di forma y pensé que sería mejor que todo pasase en un colegio mayor. Así me tiré otra hora en la cama, hilando la historia y cambiando lo que hacía falta, engordando la trama y perfilando los personajes.
En el sueño le contaba a mi mamá que la prota se llamaba Gabriela (es su nombre de chica favorito, supongo que por eso mi cerebro hizo la conexión).
También soñé el mote y el porqué de ese mote: a Gabriela todos la llaman la Galga porque corre como el viento y porque nadie es capaz de atraparla.
Los otros dos protagonistas son Nil (cierto actor con el que sueño
regularmente :P jejeje) y Héctor (un actor que me encantaba de pequeña). En el
sueño, Héctor hacía de Puck, un adorable cabroncete manipulador.
Soñé hasta el título: Y robarte un beso.
Sí, ya lo sé, esto apesta a New Adult, jejeje, y también sé que dije que tardaría en hacer otra contemporánea, pero lo siento mucho, no puedo evitarlo...
¡Que le den al Nanowrimo, ya estoy con Nil, Héctor y la Galga en la cabeza! Suele pasar, mi cerebro busca una tregua de tanto esfuerzo, jejeje, y me tienta.
Tengo que ponerme con ella porque no voy a dejar de darle vueltas hasta que lo haga, por lo menos termino el primer borrador y luego ya veremos.
Seguramente la voy a escribir en primera persona, aunque todavía no sé si desde Nil o como Héctor (en plan Gatsby), porque su mente maquiavélica es el motor de la trama.
Lo único que sé, a pesar de tener el principio-nudo-desenlace todo pensado y contando con lo que puede cambiar al escribirlo, es que mi subconsciente lo ha vuelto a hacer y la base de la idea es un clásico.
Siempre me pasa inconscientemente y a veces me doy cuenta mientras escribo, entonces meto guiños para el lector avispado ;) Ahora me explicaré mejor:
En Deus ex machina 2.0 la prota es Orfeo bajando al inframundo para robar al amor de su vida de los brazos de la muerte.
Almas de Luna tiene mucho de Peter Pan, con las sombras y los chicos perdidos y ese Nuncajamás que es Fronda.
Besos Voraces es una versión de Pigmalión, Maniquí y Pinocho.
Dos en la alborada es la lotería que hace princesa a La Cenicienta (esto me lo dijo Marisa Sicilia, yo no me di cuenta).
Hechizo de mar y luna tiene mucho de mi amor por La Sirenita y lo he reflejado de maneras muy distintas, incluso literalmente.
Por último, Y robarte un beso, creo que ha nacido de mi pasión por La Bella y la Bestia, el susurro de algunas melodías de la zarzuela preferida de mi mamá, La canción del olvido, y muchas de mis películas favoritas de los 80 y 90.
Si tenéis curiosidad, os dejo echar un vistazo.
SINOPSIS (por pulir):
Nil era el pez grande de la pecera de un pueblo de La Mancha, pero nada más poner el pie en la capital se siente en mar abierto, a contracorriente y nadando entre tiburones.
No esperaba tener que meterse en una pelea para aclimatarse a la residencia universitaria, ni tampoco conocer allí al que se convertirá en su mejor amigo, ni mucho menos fichar de paso a la chica que podría ser su primer amor... Pero no le extraña que todo le pase en el mismo día porque se siente en racha: acaba de cumplir su sueño de entrar en la RESAD, la Real Escuela Superior
de Arte Dramático, y se cree capaz de todo.
Viendo amanecer, después de pasar la noche confabulando con su nuevo compañero de cuarto, este le propone un reto.
A Nil le pierden los desafíos imposibles, es un ganador sagaz, perseverante, bastante afortunado y muy atractivo. Sabe usar su sonrisa perfecta como arma arrojadiza, con ella paraliza a sus presas y se las gana a base de labia.
El reto le parece sencillo, solo tiene que enamorar a una chica.
Sin embargo, Nil no podrá atrapar los labios de Gabriela entre los suyos fácilmente, la llaman la Galga porque es inalcanzable: corre como el viento, resulta igual de rápida escapando de las relaciones y tiene como norma inquebrantable no salir con nadie del Colegio Mayor.
A Nil le gusta la Galga y aceptará el reto, aunque suponga perder la poca ventaja que tenía al tener que llevar siempre puesta una horrorosa máscara de látex que le hace parecer un perro mastín.
Nil acepta el reto porque cree que no hay mayor victoria que vencerse a uno mismo y confía en que, aunque corra más un galgo que un mastín, si el camino es largo, corre más el mastín que el galgo.
Vale, ya sé que estoy locatis y que debería hacérmelo mirar cada vez que sueño cosas de estas, pero de alguna manera hay que pasar el tiempo y esta es la mía.
Son mis maranoias, estabais advertidos.
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