Inefable y Serendipias, de Zafón a la Oro.


Estoy hiperfeliz y agradecida, no sé cómo explicar todo lo que siento, necesito la palabra favorita de Iseo: "Esto es inefable".

Cuando le regalé el libro de Zafón a Iseo, les expliqué a las chicas una de mis más queridas creencias, que estaba segura de que por otro lado me vendría un detalle de corazón (what goes around comes around; lo que va, vuelve), porque mi vida está llena de historias así, llena de magia cotidiana.
Sonará optimista, pero para mí, es cierto.

Creo en ello firmemente. Sé que no puedo cambiar el mundo, pero sí puedo cambiar lo que está en mi mano... y cuando utilizo mi mano para dar, lo que recibo después no me cabe en los brazos.
No he tenido que esperar mucho y he salido ganando ;) sin duda.
Begoña Oro escribió esta preciosa entrada en su blog, no me había fijado en que mi nombre iba con enlace hasta que he tenido ese subidón de visitas desde su página, no me lo esperaba para nada... y no solo eso, además, ella misma ha venido a verme a mi maradriguera para darme un abrazo, eso es un DETALLAZO y todo lo que le pueda decir es poco :)
Tengo el corazón lleno porque lo que la Oro me ha dado no me cabe en los brazos.

Y ahora necesito utilizar mi palabra favorita: serendipia. 
Mirad esta foto, es la foto de grupo de la BLC2012 y también tiene una bonita historia.
Yo me fui a esconder a la última fila y crucé tres palabras con una chica. Como dos horas después, conocí a Sara y un poco antes de irme (ya por la tarde) me di cuenta de que era la misma chica de la foto. Ahí me veis, entre Sweet Sara e Iseo y Thess.
Serendipias de la vida :) (al estilo de Julio Medem en "La ardilla roja" con El Retiro incluido).
Y por cierto, ¿sabéis quién es la chica que sale en la foto que ha subido la Oro, esta vez en la 2ª fila? ¡Es Sara!
Jejeje, más serendipias de la vida :)

Llevo unos días que no paro y no tengo tiempo de casi nada, así que aprovecho para daros las gracias por todos vuestros comentarios y mimos varios, gracias por hacer mis maranoias mucho más interesantes ;).

Una última palabra, un préstamo (de otro idioma y de un amigo de otro tiempo): me voy a mimir con la sonrisa puesta, inexpirable.